Dado que el tren de transmisión produce fricción/calor a partir de sus diversas piezas móviles, es necesario refrigerarlo. La solución más común es utilizar aceite para reducir el aire caliente, que se separa mediante un filtro. Sin embargo, para aplicaciones que requieren una alta calidad del aire, esta configuración puede no ser la más ideal.
Teniendo esto en cuenta, hay modelos exentos de aceite que utilizan un ventilador de refrigeración interno. Aunque cuestan más que los compresores con inyección de aceite, estas máquinas producen mucho aire más limpio. También son mejores para el medio ambiente, ya que no hay riesgo de contaminación por aceite. Esto es especialmente beneficioso para aplicaciones alimentarias y médicas.
Si desea obtener más información sobre este tema, lea nuestro artículo titulado El compresor de pistón adecuado.